Una de las ramas más extendidas de la simulación numérica es la Mecánica de Fluidos Computacional (CFD por sus siglas en inglés). La CFD tiene como propósito resolver numéricamente las ecuaciones que rigen el comportamiento de los fluidos, las ecuaciones de Navier Stokes, que no tienen solución analítica. La evolución de la CFD ha sido tal que no solo permite predecir los campos de velocidad y presión en un fluido; sino que permite simular multitud de fenómenos relacionados con la mecánica de fluidos: flujos multifásicos, turbulencia, transferencia de masa y energía, transporte y reacción de compuestos químicos en un fluido, etc.